En los últimos años, la calidad de las prótesis mamarias ha mejorado notablemente ya que todos los esfuerzos técnicos han indo encaminados a alargar su duración y evitar la rotura por desgaste, que es lo que obliga al recambio. Pero no por ello debemos de olvidarnos de los controles periódicos para valorar la integridad de la prótesis y conocer los motivos por los que se deben cambiar las prótesis mamarias.
Las causas más comunes de rotura son el desgaste del implante, por traumatismo, contractura o fibrosis capsular excesiva.
¿Cómo nos daremos cuenta que esto ha sucedido? Las manifestaciones más comunes son disminución en el tamaño del pecho, alteración en su contorno, dolor, asimetrías o protuberancias. Pero, teniendo en cuenta que muchas roturas son asintomáticas y pasan desapercibidas, es muy importante no saltarse las revisiones.
El control de la integridad de las prótesis mamarias
Las técnicas de diagnóstico por la imagen -ecografía y resonancia magnética- son el mejor método de control del estado de los implantes.
- Ecografía mamaria: puede detectar roturas extracapsulares y en algunas ocasiones cambios en la estructura, pero no permite ver si hay rotura intracapsular (fundamental para acortar en el tiempo entre revisiones y prever el recambio de las prótesis antes que la silicona pudiera escapar de la cápsula).
- Resonancia magnética mamaria: es una técnica con mayor sensibilidad y especificidad que la ecografía en la detección de roturas intra y extracapsulares. Y además, en caso de rotura, permite visualizar dónde se hallan las partículas de silicona.
¿Cuándo debo hacerme estas pruebas mamarias?
En Estados Unidos, la FDA (Food and Drug Administration) -organismo que regula los productos sanitarios-, recomienda la revisión de los implantes mamarios siempre mediante resonancia magnética. La primera se debería realizar antes de que se cumplan tres años desde la intervención y posteriormente cada dos años.
En nuestro país las recomendaciones son diferentes, siendo la ecografía la primera prueba diagnóstica por elección y posteriormente la resonancia. Aunque puede variar en función de las características de cada mujer y de los consejos de su cirujano, el calendario estándar en pacientes asintomáticas sería:
- Ecografía mamaria al año de la mamoplastia.
- A partir de entonces y hasta el décimo año tras la cirugía, se deberían hacer revisiones con ecografía mamaria cada 2 años.
- A partir décimo año la frecuencia de la ecografía será anual.
- En caso que durante alguna de estas revisiones en la ecografía se muestre o haya dudas de un posible caso de rotura se completará el estudio con una resonancia magnética mamaria, independientemente de la antigüedad del implante.
*Recuerda que en ClinicPoint tienes precios preferentes con los mejores centros para realizarte tanto Ecografias mamarias como Resonancias Magnéticas Mamarias para controlar el estado de tus prótesis mamarias y asegurarte de que no están rotas.